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Come What May
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Come What May
por Molly Swann Vie Sep 17, 2010 10:22 pm
Los pasillos eran amplios, más de lo que esperaba, y se dividían en una gran cantidad de sectores y sitios que eran difíciles de ubicar, la luz se filtraba por una de las ventanas iluminando el solitario lugar con una clase de magia perpetua, agradable. Molly se dejó llevar por el momento, acariciando con sus sentidos los sonidos del silencio que podían percibirse en el ambiente, muy pronto, el lugar comenzaría a llenarse de vida, y eso era lo que esperaba. Lentamente dejo su maleta en el suelo, acomodando un mechón de su cabello rojizo que cayó sobre su rostro, sentándose en una de las gradas, la jovencita pelirroja cerró sus ojos ocultando su cabeza en sus piernas mientras repasaba su mano por el casquete de su violín negro.
Había llegado al sitio a la hora exacta. Solo que no encontraba la dirección a donde debía regresar, por supuesto que tampoco esperaba tanto quietud en aquella mañana, pero suponía que los alumnos apenas estaban regresando de sus vacaciones de verano.
Suspirando un poco, acomodó el flequillo de su cabello y sus ojos azules brillantes observaron una vez más el solitario ambiente. Tenía un único deseo en su mente y era llegar a su habitación y comunicarse con su amado padre que aún se encontraba en New York, después de todo el escritor, no dejaba ni un solo momento de preocupare por su única hija.
Molly miró hacía la luz de la ventana y se preguntó como había sido en los años que su madre estudió en aquel lugar, tantos años atrás, con sus propios sueños y expectativas como era ella las tenía. Suspirando, volvió a acomodarse en su sitio y saco de su chaqueta de color gris un ipod violeta, lo colocó en una composición de Joshua Bell y se dejó llevar por los sonidos de la composición, moviendo sus dedos a un compás imperceptible que solo un artista podía tener.
Sin darse cuenta, alguien acababa de llegar a la escena.
Había llegado al sitio a la hora exacta. Solo que no encontraba la dirección a donde debía regresar, por supuesto que tampoco esperaba tanto quietud en aquella mañana, pero suponía que los alumnos apenas estaban regresando de sus vacaciones de verano.
Suspirando un poco, acomodó el flequillo de su cabello y sus ojos azules brillantes observaron una vez más el solitario ambiente. Tenía un único deseo en su mente y era llegar a su habitación y comunicarse con su amado padre que aún se encontraba en New York, después de todo el escritor, no dejaba ni un solo momento de preocupare por su única hija.
Molly miró hacía la luz de la ventana y se preguntó como había sido en los años que su madre estudió en aquel lugar, tantos años atrás, con sus propios sueños y expectativas como era ella las tenía. Suspirando, volvió a acomodarse en su sitio y saco de su chaqueta de color gris un ipod violeta, lo colocó en una composición de Joshua Bell y se dejó llevar por los sonidos de la composición, moviendo sus dedos a un compás imperceptible que solo un artista podía tener.
Sin darse cuenta, alguien acababa de llegar a la escena.
Molly Swann- Mensajes : 6
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Re: Come What May
por Joseph Arsbeth Sáb Sep 18, 2010 5:48 pm
"Que hermoso día para recibir a los nuevos talentos de la academia" murmuró para si mientras seguía con disimulo a un grupo de alumnas camino a los jardines; para Joseph Arsbeth, la belleza ya no era en relación al agradable clima o el singular paisaje que rodeaba la academia... Hacía mucho tiempo que había dejado de apreciar detalles como esos. Prefería la música, y por supuesto, las mujeres... Aun a sabiendas que las chicas que lo rodeaban eran un fruto prohibido. Después de todo, nadie a muerto por mirar.
La academia volvía a abrir, un año mas pasaba como agua entre sus dedos... Por momentos se sentía viejo, aun cuando era bastante joven. Ni siquiera llegaba a los cuarenta. Pero un hombre, aunque no lo admita, que esta solo, rápidamente envejece... por lo menos en el alma. "También un hombre mal acompañado envejece rápido... incluso muere" se decía el profesor cuando en su mente aparecían pensamientos como ese.
Suspiró llevando sus manos a sus bolsillos, casi llegaba a la escalera hacia los dormitorios, la cual no estaba tan vacía (pese a que la mayoría de los alumnos estaban en las afueras disfrutando del día). Le llamó la atención el brillante color rojizo de su cabello, aun cuando no estuviera atento a su camino el reflejo de la luz en la cabellera de aquella chica lo abría llamado al instante.
Detuvo sus pasos, analizándola por un momento; la joven parecía abstraída en si misma, moviendo sus dedos al compás de una silenciosa canción. Silenciosa para él, pues al ver bien, encontró el cable de unos audífonos sobre su pecho.
-¿Esta perdida, señorita?- preguntó con voz clara, sobresaltando a la muchacha. Sonrió, satisfecho de causar aquel efecto.
La academia volvía a abrir, un año mas pasaba como agua entre sus dedos... Por momentos se sentía viejo, aun cuando era bastante joven. Ni siquiera llegaba a los cuarenta. Pero un hombre, aunque no lo admita, que esta solo, rápidamente envejece... por lo menos en el alma. "También un hombre mal acompañado envejece rápido... incluso muere" se decía el profesor cuando en su mente aparecían pensamientos como ese.
Suspiró llevando sus manos a sus bolsillos, casi llegaba a la escalera hacia los dormitorios, la cual no estaba tan vacía (pese a que la mayoría de los alumnos estaban en las afueras disfrutando del día). Le llamó la atención el brillante color rojizo de su cabello, aun cuando no estuviera atento a su camino el reflejo de la luz en la cabellera de aquella chica lo abría llamado al instante.
Detuvo sus pasos, analizándola por un momento; la joven parecía abstraída en si misma, moviendo sus dedos al compás de una silenciosa canción. Silenciosa para él, pues al ver bien, encontró el cable de unos audífonos sobre su pecho.
-¿Esta perdida, señorita?- preguntó con voz clara, sobresaltando a la muchacha. Sonrió, satisfecho de causar aquel efecto.
Joseph Arsbeth- Mensajes : 12
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Re: Come What May
por Molly Swann Sáb Sep 18, 2010 7:14 pm
En un principio no escuchó nada si fuera el caso de que estuviera escuchando. Estaba tan concentrada con la música sobre sus oídos que simplemente no deseaba tomar más atención de la necesaria. Pero un movimiento sobre su hombre la asustó, haciendo que se levantará de un solo susto y se golperá contra la pared que tenía al otro lado de la escalera.
"¡Ouch!" se quejó unos segundos mientras colocaba su mano sobre su cabeza, abriendo sus ojos observó a un hombre mayor delante de ella, asumió de inmediato que se trataba de un profesor por como estaba vestido.
"Siento mucho no escuchar" con penura se saco los audífonos y se acomodó la ropa para levantar su mano y presentarse como debía hacerlo, con educación. "Mi llamo Swann, Molly Swann" sonrió un poco tímida ante la actitud y la mirada seria del profesor, tenia un aire bastante nuevo y casual, similar al de su padre con algunos años menos.
"Lamento no ser educada, si me encuentro algo perdida" busco entre sus ropas un papel y cuando finalmente lo encontró, le indico al extraño lo que contenía. "Es mi habitación ¿...sabe en que piso la puedo encontrar?"
"¡Ouch!" se quejó unos segundos mientras colocaba su mano sobre su cabeza, abriendo sus ojos observó a un hombre mayor delante de ella, asumió de inmediato que se trataba de un profesor por como estaba vestido.
"Siento mucho no escuchar" con penura se saco los audífonos y se acomodó la ropa para levantar su mano y presentarse como debía hacerlo, con educación. "Mi llamo Swann, Molly Swann" sonrió un poco tímida ante la actitud y la mirada seria del profesor, tenia un aire bastante nuevo y casual, similar al de su padre con algunos años menos.
"Lamento no ser educada, si me encuentro algo perdida" busco entre sus ropas un papel y cuando finalmente lo encontró, le indico al extraño lo que contenía. "Es mi habitación ¿...sabe en que piso la puedo encontrar?"
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Re: Come What May
por Joseph Arsbeth Dom Sep 19, 2010 12:55 am
Cualquiera que conociera al profesor, sabría que si su ego fuese un poco mas grande, aquel primer acto de la chiquilla al ignorarlo lo habría hecho enojar, aunque no lo hubiese demostrado. Pero por su buena memoria (en especial con las alumnas... y alumnos) sabía que la joven era nueva; no podría indignarse con alguien a quien no conocía, y que quizás podría ser su alumna.
La vio golpearse con la pared, y una pequeña sonrisa torcida se dibujo en su semblante. Torpeza, un gesto sumamente adorable en los niños y algo tonto en los adolescentes, pero el rostro dulce de la joven hacía que todavía la considerada una niña. Se disculpo por ignorarlo... un punto a su favor... Luego se presento.
-¿Swann?- murmuró sin dejar de sonreír -Hermoso apellido, señorita Molly- añadió tomando su mano con gentileza, depositando un beso en ella -Joseph Arsbeth, profesor de piano y guitarra- se presento con la misma educación con la que Molly había hablado.
La pelirroja extendió un papel, el número de una habitación se distinguía en él.
-Si sólo le doy direcciones seguro se perdería- en la voz del hombre se escuchaba la amabilidad y también un dejo de burla -Para empezar, estas son las escaleras a las residencias del profesorado. Sigame- indicó, pero al notar que la joven hacía el ademan de cargar una maleta negó juguetonamente -Perdone mi falta de caballerosidad- y sin decir más, tomo el mismo la valija.
La vio golpearse con la pared, y una pequeña sonrisa torcida se dibujo en su semblante. Torpeza, un gesto sumamente adorable en los niños y algo tonto en los adolescentes, pero el rostro dulce de la joven hacía que todavía la considerada una niña. Se disculpo por ignorarlo... un punto a su favor... Luego se presento.
-¿Swann?- murmuró sin dejar de sonreír -Hermoso apellido, señorita Molly- añadió tomando su mano con gentileza, depositando un beso en ella -Joseph Arsbeth, profesor de piano y guitarra- se presento con la misma educación con la que Molly había hablado.
La pelirroja extendió un papel, el número de una habitación se distinguía en él.
-Si sólo le doy direcciones seguro se perdería- en la voz del hombre se escuchaba la amabilidad y también un dejo de burla -Para empezar, estas son las escaleras a las residencias del profesorado. Sigame- indicó, pero al notar que la joven hacía el ademan de cargar una maleta negó juguetonamente -Perdone mi falta de caballerosidad- y sin decir más, tomo el mismo la valija.
Joseph Arsbeth- Mensajes : 12
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Re: Come What May
por Molly Swann Dom Sep 26, 2010 7:16 pm
Molly frunció el ceño, arrugando la nariz en el proceso, mientras sus ojos azules brillaban con intensidad, ante el tono de burla que provenía de aquella persona desconocida, sin embargo, se calló. Personalmente no estaba interesada en molestar a un profesor. Pero, decidió que sería educada, especialmente porque el hombre sujetó su maleta y la llevó con él.
Siguieron caminando por unos pasillos más, literalmente la llevó a conocer la escuela, porque dieron tantas vueltas que Molly estaba segura olvidaría recordar el camino de vuelta. Finalmente llegarón a una serie de habitaciones, donde el profesor comenzó a ser admirado de un momento a otro por casi todo el cuerpo estudiantil del momento.
Molly no era tonta, se dio cuenta de la actitud deseñosamente orgullosa del hombre, porque tenía que admitirlo, pese a que talvez poseía la edad de su padre, era sin duda bastante atractivo. Aún así, noto cierto orgullo en él. Entonces movió los ojos aburrida, al parecer el profesor sabía de eso muy bien.
-No creo que sea recomendable que un profesor este aquí -susurró lentamente mientras paraba frente a las habitaciones- creo que encontraré mi camino desde aquí, así que... muchas gracias -sonrió, educadamente mientras más estudiantes se acercaban a observarlos.
Molly suspiró profundamente, no estaba de humor para un profesor atractivo con un séquito de fans.
Siguieron caminando por unos pasillos más, literalmente la llevó a conocer la escuela, porque dieron tantas vueltas que Molly estaba segura olvidaría recordar el camino de vuelta. Finalmente llegarón a una serie de habitaciones, donde el profesor comenzó a ser admirado de un momento a otro por casi todo el cuerpo estudiantil del momento.
Molly no era tonta, se dio cuenta de la actitud deseñosamente orgullosa del hombre, porque tenía que admitirlo, pese a que talvez poseía la edad de su padre, era sin duda bastante atractivo. Aún así, noto cierto orgullo en él. Entonces movió los ojos aburrida, al parecer el profesor sabía de eso muy bien.
-No creo que sea recomendable que un profesor este aquí -susurró lentamente mientras paraba frente a las habitaciones- creo que encontraré mi camino desde aquí, así que... muchas gracias -sonrió, educadamente mientras más estudiantes se acercaban a observarlos.
Molly suspiró profundamente, no estaba de humor para un profesor atractivo con un séquito de fans.
Molly Swann- Mensajes : 6
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Re: Come What May
por Joseph Arsbeth Mar Sep 28, 2010 3:50 pm
Pronto llegaron a los dormitorios femeninos y casi como si fuera una orden, las jovencitas se acercaron a ambos por una simple razón… Joseph, quien acostumbrado a la atención de las damas, sonreía de medio lado, en un actitud, hasta cierto punto, engreída. Por un instante llegó a olvidar la razón de su viaje hasta aquel lugar, hasta sentir el peso de la maleta en sus manos y escuchar la cantarina voz de cierta pelirroja.
La miro de reojo y sonrió ampliamente antes de volver a dirigirse al resto del alumnado.
-Señoritas, discúlpenme… en este momento estoy ocupado. Aquí la señorita Swann no encuentra su habitación y me he ofrecido a ayudarla a encontrarla- las chicas soltaron suspiros, algunas exclamaciones de lo amable que era el hombre, lo cual solo alimentaba su ego. Sin preocuparse demasiado en ello, logro que las jovencitas se dispersaran; acercándose de nuevo a la joven que venía acompañando. La observo detenidamente, al encontrar la mueca de fastidio en su rostro.
-Realmente no veo razón para que usted tenga esa expresión en el rostro- dijo, dirigiéndole una sonrisa más calmada –en cuanto a estar por aquí, déjeme decirle que usualmente los profesores solemos hacer rondas; por lo que no debería extrañarle verme por aquí- aun si el hombre hablaba para intentar agradarle a la chica, la incomodidad de ella era bastante palpable. Joseph se quedó callado antes de doblar por un pasillo y le señalo unas escaleras –El siguiente piso es el suyo; al subir las escaleras, doble al lado derecho, encontrará por ahí su habitación- personas como él, sabía notar cuando eran impertinentes o cuando no agradaban a otros; su mismo orgullo le dictaba dejar de una vez a la chiquilla, al igual que su propia educación. Dio la media vuelta para dirigirse a la salida cuando se dio cuenta de algo.
-Señorita…- la simple palabra atrajo la atención de la niña que empezaba a subir los escalones –Solo una duda… ¿Es usted una prodigio?- tenía que serlo, no había duda, las habitaciones del siguiente piso estaban destinadas a esas alumnas, sin embargo, deseaba reiterar aquella información.
La miro de reojo y sonrió ampliamente antes de volver a dirigirse al resto del alumnado.
-Señoritas, discúlpenme… en este momento estoy ocupado. Aquí la señorita Swann no encuentra su habitación y me he ofrecido a ayudarla a encontrarla- las chicas soltaron suspiros, algunas exclamaciones de lo amable que era el hombre, lo cual solo alimentaba su ego. Sin preocuparse demasiado en ello, logro que las jovencitas se dispersaran; acercándose de nuevo a la joven que venía acompañando. La observo detenidamente, al encontrar la mueca de fastidio en su rostro.
-Realmente no veo razón para que usted tenga esa expresión en el rostro- dijo, dirigiéndole una sonrisa más calmada –en cuanto a estar por aquí, déjeme decirle que usualmente los profesores solemos hacer rondas; por lo que no debería extrañarle verme por aquí- aun si el hombre hablaba para intentar agradarle a la chica, la incomodidad de ella era bastante palpable. Joseph se quedó callado antes de doblar por un pasillo y le señalo unas escaleras –El siguiente piso es el suyo; al subir las escaleras, doble al lado derecho, encontrará por ahí su habitación- personas como él, sabía notar cuando eran impertinentes o cuando no agradaban a otros; su mismo orgullo le dictaba dejar de una vez a la chiquilla, al igual que su propia educación. Dio la media vuelta para dirigirse a la salida cuando se dio cuenta de algo.
-Señorita…- la simple palabra atrajo la atención de la niña que empezaba a subir los escalones –Solo una duda… ¿Es usted una prodigio?- tenía que serlo, no había duda, las habitaciones del siguiente piso estaban destinadas a esas alumnas, sin embargo, deseaba reiterar aquella información.
Joseph Arsbeth- Mensajes : 12
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Re: Come What May
por Molly Swann Vie Oct 01, 2010 9:40 pm
Trató se ser lo más educada posible, pero tenía que admitir que su atractivo no le daba derecho a ser demasiado egocéntrico, pero Molly era como siempre una buena niña, y como ella solía actuar, no había otra persona. Así que mantuvo el temple serio y tranquilo, cuando el profesor decidió cambiar de actitud.
Y finalmente dejarla ir a sus habitaciones. Sin embargo la detuvo y la muchacha abrió sus ojos azules, mientras el cabello rojo brillaba con intensidad bajo la luz que se filtraba de la ventana de una esquina. La joven podía ser bastante bella, aunque nada orgullosa de ello.
-Si -respondió con tranquilidad, nunca se había considerado a si mismo una prodigio, pero la gente solía decirle eso desde que aprendió a caminar, pero en parte ella lo atribuía a los dones heredados desde su familia-. Aunque depende mucho de lo que una persona considera un prodigio -hubo silencio, como si quisiera analizar las expresiones del profesor-. Un prodigio nace son aquellas facultades que todos llaman únicas, aún así puede que lo herede y madure cada una de esas actitudes con la educación y la presencia de un par de padres igual de talentosos, aunque claro no mitiga el dolor de una separación constante y una soledad plena -se calló. Solía hablar demasiado de su familia, cierto que no había visto a su madre, pero su padre siempre había sido un excelente progenitor.
-Supongo que si, soy un prodigio... del canto y del violín -sonrió, levemente aun dudando de lo que era o del interés que el profesor le ponía a su persona.
Y finalmente dejarla ir a sus habitaciones. Sin embargo la detuvo y la muchacha abrió sus ojos azules, mientras el cabello rojo brillaba con intensidad bajo la luz que se filtraba de la ventana de una esquina. La joven podía ser bastante bella, aunque nada orgullosa de ello.
-Si -respondió con tranquilidad, nunca se había considerado a si mismo una prodigio, pero la gente solía decirle eso desde que aprendió a caminar, pero en parte ella lo atribuía a los dones heredados desde su familia-. Aunque depende mucho de lo que una persona considera un prodigio -hubo silencio, como si quisiera analizar las expresiones del profesor-. Un prodigio nace son aquellas facultades que todos llaman únicas, aún así puede que lo herede y madure cada una de esas actitudes con la educación y la presencia de un par de padres igual de talentosos, aunque claro no mitiga el dolor de una separación constante y una soledad plena -se calló. Solía hablar demasiado de su familia, cierto que no había visto a su madre, pero su padre siempre había sido un excelente progenitor.
-Supongo que si, soy un prodigio... del canto y del violín -sonrió, levemente aun dudando de lo que era o del interés que el profesor le ponía a su persona.
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Re: Come What May
por Joseph Arsbeth Miér Oct 20, 2010 6:00 pm
La escena era digna de un cuadro, la luz que bañaba a la joven, le daba un aire casi místico. El profesor contuvo la respiración por un momento, casi deseando tener un piano o una guitarra en sus manos en aquel momento, la etérea visión frente a él era, por decir poco, inspiradora.
Parpadeó un par de veces mientras la niña hablaba, su vocabulario parecía el de una persona mayor, pero su timbre de voz sin duda era algo infantil todavía. Sonrió con educación cuando ella terminó de hablar y miro la maleta de nuevo.
-Comprendo su punto, señorita Swann... al parecer ademas de prodigio es muy inteligente- todo rastro de egocentrismo u orgullo había desaparecido en lo que parecía ser una de las primeras frases sinceras que el profesor decía -Esa maleta es muy pesada, permitame ayudarle- pidió el hombre.
Parpadeó un par de veces mientras la niña hablaba, su vocabulario parecía el de una persona mayor, pero su timbre de voz sin duda era algo infantil todavía. Sonrió con educación cuando ella terminó de hablar y miro la maleta de nuevo.
-Comprendo su punto, señorita Swann... al parecer ademas de prodigio es muy inteligente- todo rastro de egocentrismo u orgullo había desaparecido en lo que parecía ser una de las primeras frases sinceras que el profesor decía -Esa maleta es muy pesada, permitame ayudarle- pidió el hombre.
Joseph Arsbeth- Mensajes : 12
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