Moonlight Sonata (Libre)

Mis dedos recorrían con suavidad la fina madera del hermoso piano negro frente a mí, mi mirada vagaba en el paisaje del atardecer que se vislumbraba a través de los ventanales; el sol caía lentamente, casi sin que lo notaramos, pero el cielo se teñía cada vez mas de un rojo anaranjado, que pronto se tornaria a un profundo azul.

Caminé hasta el banco del instrumento y me sente con delicadeza, tenía un trato con el profesor Arsbeth, si cuidaba a su hijo cuando el tuviera algun asunto (casi siempre una cita...) aun si se diera de urgencia; podría usar el salón sin ningun problema en el momento que deseará.

Los atardeceres eran esos momentos... La melancolía de la muerte de otro día, hacía florecer en mi lo mejor de mí alma. Sonreí con dulzura mientras la arrancaba la primera nota de la melodía que tanto me gustaba.

Quizas era un poco temprano para una cancion como esta, pero era la entrada perfecta para la noche, sobretodo cuando hoy tendriamos luna llena. Por esta y por muchas mas composiciones, Beethoven era considerado un genio.

Estaba totalmente absorta en las notas que me envolvían que no escuche la puerta abrirse, sólo noté la presencia de alguien mas cuando su voz llegó a mis oidos.

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off: Libre para el que desee unirse n_n

La mire unos momento por encima de mi hombro, todavia perdida en mis pensamientos, tocar el piano era casi una droga para mi y hacia que mis reacciones fueran mas lentas. Parpadeé un par de veces despues de comprender sus palabras y sonrei.

-Por supuesto- conteste -Bueno, mientras este en mis posibilidades- añadí al pensarlo detenidamente. Me levante del banquillo del piano y me acerque a la joven. No la conocía, o por lo menos eso creí.
-Christine Moreau- murmure extendiendo mi mano para estrechar la suya.

(off: Alison, ¿te puedo pedir un pequeño detalle? ¿podrias intentar hacer mas largos tus post? al menos 7 lineas. Y usar los guiones o las comillas para los dialogos... No quiero parecer fastidiosa -___-)

Escuche su petición en silencio y sonreí suavemente; observe la ventana con cierta melancolía, la luna apenas aparecía. Solte un suspiro de decepción, escondido en uno de cansancio. Despues de todo, mañana tenía clases temprano, debía ir a descansar.
-Por supuesto- Tome mi bolso del banquillo y volví a ella -¿Cual es tu numero de habitación?- pregunté con una sonrisa mientras nos dirigiamos a la puerta, la cual abri cediendole el paso.

Caminamos por el pasillo mientras ella intentava recordar su numero, al parecer estaba algo desorientada en ello tambien. Sonreí, recordando todas las veces que me sucedio aquello en mis primeros días.